Ruta de submarinismo en Islas Ses Bledes / Las Gorgonia – Ibiza
Busseig
COORDENADAS FONDEO: 38° 58’ 08,18’’ N | 1° 09’ 56,79’’ E
PROFUNDIDAD MÁXIMA: 40 M.
DURACIÓN: 45 Min.
RECORRIDO DE: 200 M.
DIFICULTAD: Alta
Los islotes más occidentales de la Reserva Natural Es Vedrà, Es Vedraner i els Illots de Ponent, son los llamados Ses Bledes. Formados por siete pequeñas islas nos presentan un sinfín de posibilidades para la práctica del buceo autónomo. De todas las inmersiones que podríamos realizar, destacamos, sin lugar a duda, una: las Gorgonias Rojas.
En la vertiente Oeste de la isla Sa Gorra, y junto a un pequeño canal que separa esta isla del islote más próximo, encontramos uno de los parajes más bellos de toda la isla de Eivissa. La profundidad a la que localizamos las Gorgonias Rojas y su asentamiento en una pared totalmente vertical, condiciona esta inmersión para buceadores con un grado de experiencia alto.
La embarcación la fondearemos entre el canal de paso de las islas y la vertiente Oeste del islote más pequeño, en una pequeña zona de abrigo donde la profundidad no supera los 10 metros. Como elemento de seguridad adicional, se recomienda utilizar dos puntos de anclaje (proa y popa) ya que un pequeño giro del viento puede hacer que encontremos la embarcación peligrosamente cerca de la costa.
Nuestro rumbo de inmersión será Norte, y por tanto en todo momento tendremos a nuestra derecha la pared acantilada que desciende verticalmente hasta cerca de los 60 metros. En el momento que nos empezamos a alejar del punto de anclaje de nuestro barco la profundidad aumenta de forma significativa, pero manteniéndonos en la cota 30-40 metros será su ciente para poder contemplar el gran espectáculo visual que produce un campo de gorgonias rojas para el buceador.
Debido a la fragilidad de estos organismos sésiles, no debemos entrar en contacto en ningún momento con las gorgonias, ya que un pequeño impacto podría quebrar alguna de las ramas de estos organismos.
La luz artificial destapará los colores rojizos que han quedado disimulados en un gris oscuro debido a la profundidad en que nos encontramos.
Si buscamos en las grietas y oquedades de la pared podremos encontrar meros, molleras, morenas y un sinfín de peces que utilizan este hábitat como refugio natural. Con un poco de suerte es posible toparnos con algunos ejemplares de langosta, que a esta profundidad empiezan a ser habituales.
El camino de vuelta puede variar según decidamos dar la vuelta comple- ta al islote o regresar sobre nuestros pasos a menor profundidad. Sea cual sea nuestra decisión es necesario contemplar en nuestra plani cación la profundidad a la que hemos estado buceando, y por tanto es altamente recomendable elegir un regreso por aguas someras hasta la embarcación.
Para nuestra tranquilidad, y teniendo en cuenta que hemos realizado una inmersión profunda, el haber previsto una botella auxiliar en el cabo de parada de seguridad nos solucionará cualquier imprevisto con el suministro de aire.
