En el litoral oeste de Sant Josep, cerca de cala Llentia encontramos cala Codolar, otro magnífico rincón que es destino perfecto para el snorkel o senderismo acuático, como también nos gusta llamarlo.
Como suele suceder con estas calas, son varias las opciones de recorrido pero existiendo un canal para embarcaciones en la parte izquierda, lo mejor es evitarlo y dirigirnos a la parte derecha. Ya sabéis que los canales de acceso para las tablas de windsurf, motos de agua, veleros, embarcaciones a motor, etc., son zonas prohibidas para el baño y destinadas a dar acceso a la playa a los usuarios de los deportes náuticos.
Pues bien, al entrar al agua encontramos un fondo poco profundo salpicado de rocas medianas, generalmente cubiertas de algas pardas y otras de tono blanquecino como Padina pavona.A medida que nos alejamos, dejando la pared a nuestra derecha, el fondo se presenta como plataforma
escalonada en la que se distinguen perfectamente los estratos rocosos, reproduciendo claramente el fenómeno geológico que se da en superficie, mientras que en el resto de la cala el fondo es arenoso.
Junto a la plataforma surgen piedras de gran tamaño que concentran abundante fauna como sargos, fredis y gobios que si tienen ocasión devorarán con fruición los erizos.
El agua aquí es límpida y la roca más blanca, lo que contribuye a dar más luminosidad a este fondo. En el exterior, la costa muestra pliegues y hondonadas y, frente a una de ellas, hay un escollo rocoso que emerge levemente y que es la cúspide de una gran piedra que descansa a -5 metros. A su alrededor encontramos muchas otras enteramente sumergidas y llenas de vida, que harán las delicias de los snorkelistas avanzados que gustan de hacer descensos en apnea.
La orientación oeste hace que le afecten los vientos de poniente, en cuyo caso no debemos entrar porque el agua se enturbia y se forma oleaje.