Cala Tarida

La merecidamente famosa cala Tarida es una playa de fina arena y aguas luminosas en un marco extraordinario.

Para disfrutar del mejor snorkel vamos a buscar el fondo rocoso, que es el que más vida alberga y dibuja bonitos paisajes sumergidos, así que en la parte norte de la cala iniciamos nuestro recorrido frente al islote que destaca en mitad del agua.

Al principio el fondo es arenoso, pero a medida que nos peguemos al litoral, que quedará siempre a nuestra derecha, surgirá la pared rocosa, muy poco profunda. Iremos hacia la pequeña vaguada en la que destacan las casetas varadero. Frente a ellas el agua es radiante y es fácil ver peces habituales en fondos arenosos y de roca como mabras, salmonetes y cardúmenes de pequeños alevines que buscan refugio en estas aguas calmadas.

Ya cerca de la punta, la pared comienza a presentarse vertical, haciendo su

aparición en el fondo rocas cada vez mayores y entre ellas, matas de posidonia. Aquí la vida es abundante: grandes sargos y mojarras patrullan en busca de alimento mientras que las salpas pastan entre la posidonia. Los que gusten de hacer descensos encontrarán un lugar ideal, con agua limpias y caídas más allá de 6 metros de profundidad en un fondo salpicado de losas y piedras enormes que ofrecen refugio a muchas especies y caza para los depredadores, que, como la dorada o la lubina, hacen incursiones fugaces para capturar alguna despistada presa.

Los pulpos casi siempre se encuentran bien escondidos en sus refugios aunque con un poco de suerte tal vez nos encontremos alguno fuera viéndose enseguida rodeado de otros peces.

El regreso lo haremos invirtiendo el sentido, evitando atajar por la recta que nos lleva al origen porque atravesaríamos un extenso arenal sin mucho interés.