Pocas personas reconocen el topónimo de Sa Caleta con su verdadera ubicación. La vecina playa de Es Bol Nou es con la que se confunde habitualmente, pero tras esta playa hay una pequeña bahía cerrada repleta de casetas varadero. Es aquí donde se esconde la auténtica Caleta, un rincón muy marinero donde en la actualidad aún podemos ver pequeños llaüts saliendo a faenar como ya hacían los primeros pobladores de la isla, cuando desembarcaron por primera vez en esta zona de la isla.
El encanto de este rincón es que se trata de un paisaje típico de la costa ibicenca, que suele estar frecuentado por gente autóctona que aún mantiene vivo el antiguo arte de la pesca. Además, es perfecto para darse un baño y bucear en sus cristalinas aguas pues los distintos muelles de la zona, facilitan el acceso al agua. En resumen, un rincón típico de la isla donde respirar la paz que Ibiza te puede ofrecer.
Para acceder a este lugar nos deberemos dirigir hacia la playa des Bol Nou, señalizada como Sa Caleta. Si partimos de Sant Josep en dirección Eivissa, a unos 5km encontraremos en la carretera principal el desvío de Cova Santa que conduce a esta zona. Durante un rato iremos recorriendo la carretera y pasaremos de largo el desvío a Cala Jondal. Poco después encontraremos el cruce que nos conducirá a Sa Caleta. Seguimos pocos metros el camino sin adentrarnos en el parking de esta playa, ya que enseguida a la izquierda hay un pequeño camino que conduce directamente a Sa Caleta.